Un equipo de astrónomos universitarios de la Universidad de Washington descubrió cómo convertir una molestia en un descubrimiento importante, descubriendo 1.300 nuevos asteroides; casi 1 de cada 250 objetos conocidos en el Sistema Solar. ¿Cómo sacaron de esta hazaña? En realidad, era un proyecto paralelo a su investigación real: la búsqueda de supernovas. Los asteroides se estaban interponiendo en el camino.
Los investigadores universitarios estaban buscando datos recopilados como parte del Sloan Digital Sky Survey. Esta es una colección de imágenes detalladas del cielo reunidas por un telescopio automatizado de 2.5 metros. Los investigadores estaban buscando evidencia de estrellas explotadas, llamadas supernovas, pero los asteroides se interponían en el camino.
En lugar de simplemente evitar los asteroides que bloqueaban su vista, decidieron seguirlos y ver si alguno no estaba identificado. Resultó que 1.300 eran nuevos.
Andrew Becker, profesor asistente de investigación en astronomía de la UW, explica las frustraciones iniciales: “Seguía preguntando a los estudiantes qué habían encontrado y seguían diciendo:‘ Más asteroides. No hay supernovas, sino muchos asteroides ".
Los estudiantes de pregrado desarrollaron programas que les permitieron buscar automáticamente en los datos de Sloan, identificando asteroides y ayudándoles a clasificarlos. Además de descubrir 1.300 nuevos asteroides, compilaron datos adicionales sobre 14.000 asteroides que ya se conocían. Esto permite a los astrónomos calcular sus trayectorias con mayor precisión y determinar si alguna amenaza para la Tierra en el futuro.
Fuente original: Comunicado de prensa de UW